La búsqueda es reducir las faltas de tránsito. En lo que va del año se colocaron 45 nuevas cámaras y se busca instalar otras 30.

Las faltas o infracciones de tránsito son mucha y existen todos los días en la Ciudad de Buenos Aires. Ese número elevado de situaciones, sin dudas, es una cuestión a revisar y a mejorar, pero no ocurre de un día para el otro. En ese sentido, el Gobierno Porteño se encuentra en el proceso de generar una serie de medidas preventivas. Una de ellas es la instalación de cámaras fijas de fotomultas.

En lo que va del año fueron 45 las nuevas cámaras que se instalaron y que se suman al total de 95 prexistentes. El objetivo será multiplicar en un 80% la cantidad previa, por lo que se buscará instalar 30 cámaras más antes de fin de año.

Como resulta natural, los nuevos tramos de control tendrán lugar en aquellas zonas más problemáticas o con más densidad de infracciones. Por eso las avenidas en general, considerando a Córdoba, Lugones, Cantilo, Del Libertador, Santa Fe y Corrientes como las más problemáticas, tendrán el foco de atención. Además también estarán custodiadas las autopistas. De hecho, del total de las cámaras que se encuentran en funcionamiento, el 69% vigila las avenidas, mientras que el 26% están destinadas a las autopistas. El restante 5% corresponde a las vías rápidas de circulación.

Considerando que existieron más de un millón y medio de infracciones multas durante el año pasado, cabe destacar que un 43,74% fueron por excesos de velocidad, por lo que las nuevas medidas tecnológicas mencionadas podrán ayudar significativamente a reducir esos números. Y todavía más: considerando que en esas situaciones existieron 74 eventos con heridos, las nuevas medidas no sólo ayudarán en las estadísticas, sino también en la vida concreta de los vecinos. Se estima que en los próximos meses y por primera vez, el Gobierno de La Ciudad liberará la lista completa de cámaras con su ubicación exacta.