Los Juegos Olímpicos de la Juventud han revitalizado espacios no tan visitados de la ciudad y les ha dado una nueva cara a otros más conocidos. El Parque Verde es un ejemplo de ello.

El Parque Verde, uno de los grandes espacios de los Juegos Olímpicos de la Juventud, ha sido escenario de importantes competiciones siempre con una afluencia de público desbordante.

El parque ubicado en derredor del Buenos Aires Lawn Tennis Club, cerca del Hipódromo y de los lagos, estuvo muy acondicionado para la ocasión.

Allí se desarrollaron las competencias de tenis, entre otras. En el mismo escenario que brillaron grandes tenistas, la dupla argentina conformada por  Sebastián Báez y Facundo Díaz Acosta  se llevó la medalla de oro de dobles el día domingo. Un día antes, Díaz Acosta perdió la final de single quedándose con la de plata.

Muy cerca de la entrada y luego de pasar un escenario, en el que actuaron diversos artistas, las canchas de Beach Voley quedaron chicas para tanto entusiasmo de los espectadores.

Las competencias de ciclismo se desarrollaron en cinco  días bajo diversas modalidades alrededor del parque y  se pudieron apreciar con comodidad a la vera de los distintos circuitos.

Cerca de allí también, Richard Kierkegaard, el joven con apellido de filósofo, hizo una gran tarea en hipismo, pero no le alcanzó para llegar a la medalla.

No todo fue eso: actividades de iniciación deportiva, juegos para niños, muchas opciones gastronómicas y un clima aliado de los juegos hicieron una fiesta de Palermo.

Si bien es un parque temporario sería bueno que las mejoras sean respetadas ya que cambió la cara de un lugar por muchos conocidos pero que pareció revitalizado.

Guillermo Cerminaro