Es para posibilitar las obras de ensanche en la Avenida Rivadavia. Allí realizarían un centro de trasbordo.
Hay obras arquitectónicas que componen la personalidad de los barrios. Son imponentes, son históricas, se le conoce cada esquina y cada vericueto. Es cierto: el ingreso a la Línea de A de subtes ubicado en la Plaza Primera Junta seguramente no sea de los espacios más estéticos del barrio. Pero, sin dudas, es una postal emblemática, una imagen clásica del día a día del barrio.
Ahora, el Gobierno Porteño evalúa demolerlo para facilitar el trabajo de ensanche de la Avenida Rivadavia –que será entre Nicolás Repetto y Federico García Lorca-. Para ello se achicará la rampa que da comunicación entre la superficie de la calle y las vías subterráneas. La idea sería colocar allí una estructura similar a aquella que conforma el Centro de Trasbordo Constitución en la comuna 1.
Una particularidad de la obra es que estaría a cargo del Ministerio de Ambiente y Espacio Público porteño y no de la empresa Subterráneos de Buenos Aires (SBASE).
Fue en los años 20 cuando se construyó el ingreso a la estación en cuestión. La obra fue propiciada por la Compañía Anglo Argentina, aunque en ese momento fue pensada para funcionar como parada de tranvías. De hecho, quienes presten atención podrán ver en las zonas cercanas algunas evidencias de las vías en cuestión.
Este proyecto funciona en concordancia con la puesta en valor del Mercado del Progreso, que comenzó su proceso durante diciembre del año pasado.
Lo cierto es que el espacio en cuestión no representa solamente parte de la identidad del barrio: también la forma día a día al funcionar como una feria de libros y ser sede de grandes actos de cuestiones concernientes a la personalidad barrial.