En los primeros cuatro meses de 2019 más de 7.000 comercios cerraron en Capital Federal y el conurbano bonaerense, lo que llevó a que casi 30.000 personas perdieran su trabajo en ese lapso de tiempo.  El barrio de Villa del Parque tiene el sórdido “pivilegio” de ser uno de los barrios más afectados por la crisis comercial que atraviesa el país y la ciudad.

La paralización económica que afecta el país avanza a pasos acelerados.  La cantidad de fábricas y comercios, que achican su planta o cierran crece día a día y ya no afecta sólo a las Pymes, sino que también empieza a dejar sus secuelas en las grandes empresas. Las suspensiones y despidos aumentan exponencialmente Desocupación mediante, el neoliberalismo ha cumplido con su consigna de bajar el costo laboral, hoy el salario promedio es casi un 60% del que había en 2015 y los trabajadores argentinos han pasado en tres años, de ser los mejores pagos de Latinoamérica a estar entre los últimos de la tabla en el concierto regional.

Según la agencia Info GEI de la ciudad de La Plata, y en base a un relevamiento que se llevó a cabo en 38 barrios de la Capital Federal y 50 del Conurbano Bonaerense, entre enero y abril de este año cerraron 7026 comercios y perdieron el trabajo 28.304 personas. Los negocios cerrados en ese lapso en la Ciudad de Buenos Aires alcanzan los 2.446 y los principales barrios afectados son: Palermo Hollywood (180 comercios menos), Chacarita (126), Barrio Norte y San Telmo 120), Villa del Parque (100), Centro Porteño, Almagro, Villa Lugano y Recoleta (90). 

El estado de la crisis ha llevado a que a principios del mes de mayo se llevara a cabo en la plaza Aristóbulo del Valle una Audiencia pública de los vecinos, comerciantes y empresarios de la Comuna 11, para proponer alternativas desde el barrio para enfrentar el aumento impagable de las tarifas y la presentación de un proyecto de ley de EMERGENCIA TARIFARIA que contemple tarifas justas para todos, aumentos tarifarios no superiores a la variación salarial, imposibilidad de corte a familias de bajos ingresos, plan de contingencia ante situaciones de cortes masivos y tarifa social para Pymes, comercios familiares, Cooperativas, Espacios Culturales, Clubes de barrio, Entidades de bien público, jubilados, pensionados y personas con discapacidad o ingresos por debajo de la línea de pobreza.

El panorama se agravará en este mes de junio, en el que de un plumazo cerrarán los 50 locales que abren sus puertas en el Shopping de la calle Cuenca,  que dejará de funcionar a fin de mes, afectando además de manera indirecta a todos los negocios del área ya que el complejo comercial es un centro de atracción de público y favorece el movimiento de paseantes y potenciales clientes en la zona.

Otro dato de la realidad que agudiza el estado de alerta en que se vive es que si bien la inflación minorista interanual al mes de abril es de un escalofriante 55,8%, la inflación mayorista en el mismo período ha sido de 72, 6%, delatando que los comercios minoristas no pueden trasladar a los precios ese porcentaje de aumento y, para poder vender, están trabajando con un margen de ganancia muy inferior al normal, situación que los pone, en muchos casos, al borde del cierre.

Por Eduardo de la Serna