Igual que ocurre en muchos otros puntos de la ciudad, vecinos y vecinas del barrio exigen la expropiación de terrenos baldíos para crear espacios públicos recreativos.
La pandemia ha evidenciado la necesidad de los espacios públicos, de los espacios verdes, de los espacios de esparcimiento, de recreación, aquellas porciones ganadas al pavimento en el que, con un poco de imaginación y un poco de suerte, poder abstraerse del ruido y de la furia que unos metros más allá, permanecen. Allí, en las plazas (las plazas que faltan, que siempre faltarán) se pone en juego o, mejor dicho, se evidencia la necesidad de una fuga, de un punto de quiebre en la aparente linealidad del asfalto.
Por ese motivo, vecinos y vecinas del barrio de San Telmo, así como vecinos y vecinos nucleados en muchos otros barrios de la ciudad de Buenos Aires, presentaron en la Legislatura Porteña un proyecto para que un terreno baldío se convierta en una plaza.
Esta misma iniciativa ya había sido presentada tiempo atrás, en 2018 y 2020, pero perdió estado parlamentario tras no ser tratada. Allí, en Independencia y Bolivar, donde antes funcionaba una antigua casona que fue demolida, se busca instalar una plaza que se llamará “Pedro Benoit”, previa expropiación del baldío por parte del estado.
Según explicaron los vecinos, “Benoit fue reconocido como autor del trazado para la urbanización de la ciudad de La Plata y otras ciudades del país”, además de haber sido el propietario de la casona que fue demolida en 2008.
Además, dijeron: “Impulsamos la construcción de una nueva plaza en ese predio, incorporándolo como espacio público, motivados también por la defensa del patrimonio y la preservación de la identidad de una parte fundamental del Casco Histórico ya que con la demolición se destruyó parte del patrimonio arquitectónico de la Ciudad”. “el barrio de San Telmo sufre particularmente la falta de espacios verdes ya que en más de 120 manzanas conformadas entre Plaza de Mayo y Parque Lezama, y entre la avenida 9 de Julio y Huergo, existen sólo dos pequeñas plazas más”, agregaron.
Para producir un marco amplio de trabajo participativo que permita incorporar en el proyecto las necesidades específicas de los vecinos y las particularidades del barrio, plantearon la creación de una mesa de trabajo conjunta entre vecinos, especialistas en conservación de patrimonio y representantes de las área de Gobierno porteño “para trabajar mancomunadamente a partir de los valores, símbolos y significados, estableciendo criterios de diseño del nuevo espacio público en San Telmo”.